lunes, 11 de junio de 2012

No tendréis un bonito cadáver

James Dean predicó con el ejemplo. 
Iggy Pop, David Bowie, Lou Reed, Eric Clapton, Bob Dylan, Keith Richards, BB King, Mick Jagger y Leonard Cohen no pudieron hacerlo. 
Les dijeron que para ser un mito hay que morir joven, en la más deslumbrante plenitud, y ellos pusieron todo de su parte pero acabarán por enterrarnos a todos. 
La brevedad no ha sido una de sus virtudes, pero ser un mito tal vez consista en no morirse nunca o, llegado el caso, en hacerlo de una manera inolvidable: con un último acorde de guitarra sobre el escenario. 
Pie de foto: Mosaico realizado por Martínez Clares, 2012.

22 comentarios:

  1. Hasta la muerte tiene su glamour, amigo, ciertamente. El mito lo es en la memoria de los vivos. Pero a ellos, ya sean héroes o villanos, tanto les dará, pues una vez la muerte actúe de oficio, la eternidad sobrevendrá desarticulando para siempre la noticia del tiempo. Y como decía Hierro: "Después de tanto todo para nada". O sea nada de nada.

    Un abrazo, José Luis

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    1. La memoria tiene esas cosas, don Miguel, que nunca es para siempre, que se lleva muy mal con los recuerdos, que no conoce la justicia ni tiene el más mínimo decoro. ¡Maldita seas, olvidadiza!
      Un abrazo, Miguel

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  2. Los mitos les fabrican los vivos. A los muertos ya no les importa nada...
    Besos desde el aire

    PD. Un buen maestro no tiene precio, como tú dices, nos puede regalar experiencias increíbles.

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    1. Algunos vivos disfrutan la angustia de morirse bien y además dejar huella. Son pequeñas ambiciones que se le pieden disculpar a un muerto. Abrazos

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  3. Pienso que tiene más mérito el mito que no lo es por morir joven. Seguramente James Dean no habría sido tan encumbrado de no haber muerto a una edad tan joven y con tan pocas películas en su carrera.

    Un beso

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    1. Hay algo cierto de eso.Jhon Lennon se ha convertido en una leyenda mientras que McCartney languidece en su ocaso senil
      Un abrazo

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    2. Nunca lo sabremos. La respuesta no está a nuestro alcance. Desde luego, hay artistas que hubiesen pasado a la historia si su primera película, su primera novela, su primera canción hubiesen sido también las últimas. El declive muchas veces resulta patético, pero no es el caso de los anteriormente mencionados.
      Besos

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    3. Juanjo: tienes mucha razón. McCartney ha hecho buenas cosas después de Lennon pero lleva un tiempo desaparecido o trabajando en proyectos que no han tenido relevancia. No obstante es un grande. Lennon, qué duda cabe, ha sido añorado, y ese capricho del destino no ha podido disfrutarlo McCartney. De todas formas, personalmente preferiría perdurar aunque fuese en el anonimato. ¿No crees?
      Abrazos

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  4. Haber sobrevivido a los años 70 también tiene su mérito, se merecen una lápida de oro.
    Cuídate José Luis.

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    1. Es cierto, Rafael. Dicen que los setenta podían acabar con cualquiera. Abrazos

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  5. Creo que los mitos los hemos cultivado nosotros, esta generación nuestra que en unos años pasará a saludar a sus muertos. Ahora, ya no hay "presencias" ausentes, todos estos artistas prefabricados de hoy pasan como avalancha por la mente de nuestros hijos y jóvenes cercanos. Ahora se puede morir quien quiera, detrás hay cinco clones esperando su minuto de fama.
    En cuanto a Paul aquí en México ha tenido unos conciertos muy sonados.

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    1. Una gran verdad, Belkys. Ahora todo es muy efímero y los ídolos casi no tienen tiempo de ser idolatrados. "A rey muerto, rey puesto", que decimos por aquí.
      Nos cuentan que habitamos un mundo global, pero de algunas noticias no tenemos noticia. Bien por Paul.
      Abrazos

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  6. En cierta ocasión vi un documental sobre Jagger en el que comentaba la estricta dieta baja en calorías que seguía de forma inflexible. Y los zumos naturales variados que se tomaba para mantenerse en plena forma. Y una marca concreta de yogures que le traían si no recuerdo mal de los Paises Bajos. Una locura muy controlada. Por tanto,algunos siempre tuvieron muy claro que desean ser mitos y ala vez seguir vivitos y coleando.Un abrazo

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    1. Sí. Además corren una serie de leyendas sobre la eterna juventud de los Rolling que no sé cuánto crédito merecen. Pero es cierto que todos se han cuidado más de lo que nos cuentan. Tal vez, la buena salud sea una rémora en el Rock, en el sentido en que lo era ser el empollón de la clase en el instituto. La mala salud del reckero es algo que se le presupone, como el valor al soldado. Es hermoso contraponer la crudeza del rock a esa fragilidad emocional de sus intérpretes. Abrazos

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  7. Recordabamos aquello que dijo Ángel González :
    Los muertos son egoistas:
    hacen llorar y no les importa..
    Lo malo que tienen los muertos
    es que no hay forma de matarlos...

    Y digo yo, algunos muertos siempre están presentes porque queremos que nos acompañen. Los "otros" solo sirven para recordarnos lo que nos espera ( ésto me ha quedado un pelín macabro ) pero me temo que es así.
    De los mitos está todo dicho. Y si viven una retirada a tiempo..

    Un abrazo

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    1. Últimamente, nos ronda Ángel, nos envuelve con sus versos acertadísimos. Es la actualidad permenente de los que ya no están. Un poco en la línea de que los viejos rockeros nunca mueren. Me parece tremenda esa virtud de algunos genios que les permite seguir explicando la realidad desde su tumba. ¿No crees? Besos

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  8. Morir joven es siempre una vida inacabada, y en un artista, una eterna promesa cumplida sólo en el lado de la leyenda. James Dean es el mito, pero el actor-actor es ese otro tipo al que le arrebató el papel de Cal Trask en "Al Este del Edén" pero luego vivió lo bastante para ser todo un Paul Newman. Un abrazo.

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    1. El actor es Newman. Efectivamente. A veces, esa pequeña derrota es una promesa de eternidad. Dean es una incógnita indescifrable. Quizá se tomó demasiado al pie de la letra lo efímero de la existencia, la belleza de los cadáveres jóvenes. Tres títulos para una filmografía. Un bocadito escaso. Acaso un tentempié. Abrazos

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  9. La caja de “mitos y leyendas” es muy desconcertante. Sucede lo mismo con los libros, si publicamos la biografía de cualquier artista con certificado de defunción, cuenta, de antemano, con una legión de compradores, publicidad en televisión, radio y portada en los periódicos.

    Elevar a la eternidad a jóvenes que precipitaron sus acontecimientos en vida, sigue siendo un “hobby rentable” para la industria, por eso, siempre me pregunto, ¿seguirían siendo un mito Camarón o Bob Marley si no hubieran sido precursores de la muerte?

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    1. Yo creo que sí, Paco, pero a condición de no poner en evidencia a su propio talento más de lo aconsejable. No obstante, los muertos son muy productivos: recopilatorios, caras b, directos inéditos, garabatos en un papel... una extensa producción semioculta y recóndita que parece inacabable. Y qué dure.
      Abrazos, amigo

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  10. Es muy cierto lo que dices y es una pena,porque sobre el escenario quedan unnnn montón de gente bueniiisima, que quizás por estar "vivos" no se les otorga ese "poder", el poder de vender más que ningún otro por estar muerto.Qué verdad más grande.Milllll besitos, hacía mucho tiempo que no te visitaba y hoy tengo un hueco y paso a darte un besito!

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    1. Midala: el tiempo que nos falta... me encanta verte por aquí de nuevo. Besos

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