Aunque parezca mentira, ya hace casi tres años que nos encontramos entre los claroscuros de este blog. Durante este tiempo, alguna vez me he planteado si sería lógico perpetuar aquello que, por denominación, debería ser efímero. Finalmente, he cedido a mis deseos más oscuros y, de entre todas las publicaciones que se han ido sucediendo en este periodo, he seleccionado unas cuantas sin el menor rigor ni criterio. Son aquellas que mejor se acomodan a mi gusto personal las que constituyen “Versos para descreídos”, el libro que resume toda la trayectoria de esta bitácora.
Su lectura sosegada me ha regalado una última e inquietante conclusión: en sus páginas falta lo más importante del blog… vuestros comentarios.
Pie de foto: Portada de Versos para descreídos.
(Para leer el libro pulsa sobre la imagen o búscalo en el menú de la derecha).
Nos felicitamos todos por que nos permitas éstar aquí y esperando ese momento de sosiego, vuelvo y leo.
ResponderEliminarBesos
Por y para vosotros. Besos, Abril
EliminarLe verdadera esencia de tus versos consiste en que si eras descreído, conforme empiezas a leerlos se va iluminando la palabra para infundirte, en el trayecto emocionante de la lectura, la fe en lo humano, que es lo efímero, hasta el deslumbramiento final del con-verso. Hace ya tiempo -desde que descubrimos tu blog- que sabemos que las palabras efímeras dejan la huella más sutil: la del sentimiento mágico de la vida, parafraseando a Unamuno a mi manera.
ResponderEliminarFelicitaciones y aquí seguiremos -si se nos permite- hasta cumplir otro trienio en esta vocación de permanencia.
Un abrazo grande, José Luis.
Gracias, Miguel. Un abrazo se me antoja poco. Vendrán más en los próximos tres años.
EliminarMuchas felicidades, y agradecido por mencionar nuestra humilde aportación.
ResponderEliminarLas humildes son las indispensables.
EliminarMuchas felicidades y me ha encantado como te ha quedado el libro
ResponderEliminarUn abrazo
Me alegro, amigo Juanjo. Abrazos
EliminarEstoy deseando leerlo, espero que lo efímero siga teniendo tan buena salud.
ResponderEliminarUn saludo, José Luis.
Gracias por tus palabras, amigo Rafael. Un abrazo.
Eliminar¡Enhorabuena, JL! Felicidades y gracias por compartir esos versos. Larga vida al territorio de lo efímero. Un fuerte abrazo
ResponderEliminarTerritorio de lo efímero... buen título para lo que sea. Abrazos
EliminarFeliz cumpleblog, José Luis. Tus efímeras palabras siempre me llevan a la reflexión. Espero que sigas compartiéndolas con nosotros mucho tiempo.
ResponderEliminarUn beso.
Claro que sí, amiga Myra. Aquí seguiremos con vuestro permiso. Besos
EliminarBueno bueno bueno, me parece una iniciativa maravillosa. No he tardado nada en reenviarlo a un par de camaradas a quienes, estoy seguro, les va a encantar. Un muy hermoso regalo el que nos haces. Un abrazo infinito.
ResponderEliminarInfinito agradecimiento el mío. Abrazos, Juan.
EliminarPero vamos a ver. Debieras ser tu el homenajeado. Y por contra vas y nos regalas a los que por aquí pasamos tus exquisitas reflexiones escogidas...
ResponderEliminarEs un lujo pasar por aquí, un lujo leerte y otro más compartir contigo. Siempre sorprendente. Hay páginas como la tuya que,si me lo permites, son mucho más que un blog. Un abrazo.
Muchas gracias, amigo Victor. Un abrazo
EliminarCuántas veces mi camarada Juan Fernández me ha hablado de tu obra. Reconozco que me abruma saber que hay tanta gente valiosa y tanto por leer por eso paso de puntillas por este mundo digital. Pero tu libro es sugerente: ha despertado mi apetito. Gracias.
ResponderEliminarGracias, José Luis. Tus "ESTELAS DE UN FUNAMBULISTA IMAGINARIO" descansa en mi librería escoltado por los "PASADIZOS" de Juan y por mis "PALABRAS EFÍMERAS". Puede que existan compañías más selectas pero estas se ejercen desde la proximidad y el cariño que nos regala el paisanaje. Abrazos
EliminarFelicidades por el libro! Gran trabajo.
ResponderEliminarMe alegra encontrate aquí. Tu blog ya está entre mis objetivos. Abrazos
EliminarLo efímero,el instante,siempre tienen algo de imperecedero.Lo fugaz puede convertirse en un paréntesis de algo mucho más grande.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo.
En lo fugaz, a veces, ya se huele algo. Abrazos, amigo
EliminarCoincido con V, un lujo, y feliz cumpleblog, ¡¡¡no se te ocurra desaparecer¡¡¡
ResponderEliminarDe aquí no me voy hasta que me echen. Muchas gracias, amiga Carmen.
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