Era eso.
Me cuentan que nada es más solemne que una reunión en tiempos de crisis.
Allí, no se menciona el dinero.
Los recortes van llegando, pero los jerarcas nunca rebajan su caché.
Con voz grave, piden un sacrificio que les permita seguir cobrando el trabajo que otros realizan.
Desde siempre, el cinismo ha llenado sus bolsillos apelando a la responsabilidad.
Pie de foto: Servidumbre. Martínez Clares, 2011.
Y asi seguira siendo por los siglos de los siglos ¿AMEN???????
ResponderEliminarUn abrazo
Cinismo por responsabilidad... Es el pan nuestro de cada día.
ResponderEliminarBrillante análisis, José Luis.
Abrazos.
No les duelen prendas en subirse el sueldo mientras nos recortan los nuestros.
ResponderEliminarBesos desde el aire
En tiempos de crisis les cuesta a los jerarcas elevarse del suelo y tiran lastre: el de la cultura el primero, el de la educación, el de la sanidad... Y lo malo es que quieren seguir cobrando del trabajo al que han dejado de tener derecho tantos y tantos. Un abrazo.
ResponderEliminar(Y tantos...)
Lamentable pero cierto.
ResponderEliminarUn abrazo!!!
Juanjo: efectivamente. Y si pretendiésemos cambiarlo nos apuntarían que el sistema no puede funcionar de otra manera. Abrazos.
ResponderEliminarMJ: el cinismo es una manera parasitaria de vivir. Acostumbra a valerse de los valores ajenos para conseguir sus objetivos. Abrazos
ResponderEliminarJuan: nos veremos como esos antiguos trovadores que rimaban leyendas a las puertas de una ciudad putrefacta. Abrazos.
ResponderEliminarAndri: sólo es cierto lo lamentable, que diría un pesimista. Abrazos.
ResponderEliminarRosa: no se suben el sueldo exactamente. El truco consiste en que cobran conceptos que han dejado de cobrar sus subordinados por ayudar a la empresa, aunque no los trabajan porque lo siguen haciendo los trabajadores sin cobrarlos. Besos a ras de suelo.
ResponderEliminarBien dicho, desde siempre. Bíblico, evangélico, Judas y la predicación con el ejemplo, pero sólo de los que comulguen.
ResponderEliminarSergio:... con ruedas de molino. Saludos
ResponderEliminara veces lo cierto es tan crudamente verdadero.
ResponderEliminarSaludos
Brenda: me alegra verte por aquí. Saludos
ResponderEliminarEsta gente..lo que tiene es un rostro impresionante!!!se suben los sueldos porque en tiempos de crisis está claro que hay que esforzarse y eso requiere subir el sueldo.>Sus pensiones cuando se jubilan son millonarias y a la hora de pagar impuesto...ya mejor no hablar.Millll besoss
ResponderEliminarMidala: un placer verte por aquí. Espero que sigas recuperándote de manera satisfactoria. Besos
ResponderEliminarHay besos y besos, sólo hay que aprender a diferenciarlos.
ResponderEliminarSaludos.
LNJ: a veces, los que más enganchan son los que no podemos diferenciar. Saludos
ResponderEliminarPues sí, llevas razón.
ResponderEliminarGracias.
Te doy toda la razón y lo malo es que parece que no nos preocupa porque no hacemos nada!
ResponderEliminarPodríamos?
Feliz día y gracias por tu comentario.
Un abrazo
Beatriz: no hacemos nada porque en este país nuestro la corrupción es comprendida. Lo habitual es oir: si yo estuviera ahí...
ResponderEliminarAbrazos
Yo me pregunto, ¿que pasaría si esas reuniones, y no me refiero solo a tu sector que es la educación sino por ejemplo también al mío que es la sanidad, se hiciesen públicas?. Cuando exigen lo que exigen con los papeles en la mano... Se les caería la cara de vergüenza a mas de un político, como poco. Un placer descubrir tu blog. Saludos :).
ResponderEliminarMaría José: los tiempos de crisis son tiempos de villanos. Gracias por venir. Nos volveremos a ver. Saludos
ResponderEliminarpregonan ajuste y sacrificio, hambre al pueblo para salvar a los mercados, sus bolsillos.
ResponderEliminar¿existirá algo más mísero que su propia miseria?
pero en tiempos de crisis los villanos desvelan su cinismo. son tiempos de "tempestad fertilizadora", en que debemos resistir, permanecer con "la cabeza descubierta".
saludos, y fuerza.
Los sacrificados y los recortes siempre llegan para los más débiles, no es justo.
ResponderEliminarUn beso.
Andrés: resistencia es lo único que tenemos. Saludos reforzados
ResponderEliminarClaro, María, porque los ricos no tienen sacrificios sino ligeros contratiempos. Besos
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